Película de la semana
- "El Limonero" dirigida por Eran Riklis
jueves, 12 de junio de 2008
There she goes...
“I entered this race because I have an old-fashioned conviction that public service is about helping people solve their problems and live their dreams. I've had every opportunity and blessing in my own life, and I want the same for all Americans. And until that day comes, you'll always find me on the front lines of democracy, fighting for the future…”
Este extracto del discurso final de Hillary Rodham Clinton, con el cual finalizó su campaña por lograr ser la primer candidata a la presidencia de los Estados Unidos expresa la constante del mensaje de la exprimera dama y senadora por el estado de Nueva York. En español, Hillary dijo ese día:
“Entré a esta carrera porque tengo una convicción, formada en la vieja escuela, de que el servicio público es para ayudar a la gente a resolver sus problemas y a cumplir sus sueños. He tenido muchas oportunidades y bendiciones en mi vida y eso es lo que deseo para todos los americanos. Y hasta que ese día llegue, siempre me encontrarán en las líneas frontales de la batalla por la democracia, luchando por el futuro…”, dijo en el Museo Nacional de la Construcción de la capital estadounidense ese día Hillary Clinton.
De ella escribíamos a principios de este año como la persona que daría mucho de que hablar en esta contienda en la cual muchos pensábamos ganaría, el tiempo y la circunstancia cambiaron por completo y el gran triunfador es el también senador Barack Obama, quien dio la sorpresa por un cerrado margen en una carrera parejera que ganó por una nariz, que fue suficiente para derrotar a la primer mujer en aspirar a ocupar la silla que por ocho años ocupara su esposo William Clinton.
¿Qué pasó con la exprimera dama?
Es una pregunta que nos hicimos muchos cuando la carrera por la nominación demócrata se tornaba parejera y primaria tras primaria, caucus tras caucus, la conclusión tenía una constante: cambio y esperanza. Es decir, Hillary Clinton dejó de ofrecer esto a la mayoría de los demócratas o al menos no lo hizo con la agresividad de su contrincante y su mensaje no penetró. Hillary utilizó estrategias tradicionales para difundir su mensaje, para convencer, hizo lo que otros han hecho siempre y eso reafirmó lo que su oponente decía por el otro lado, “dejemos las dinastías del poder, busquemos el progreso con alternativas y no regresando pasado una y otra vez, ¡ya basta!”
No era suficiente con ser la primer mujer en querer ser presidenta de los Estados Unidos para demostrar que representaba la vanguardia e innovación. Había que comunicarlo con efectividad, no solo decirlo.
Con un mínimo margen en delegados y en voto popular, pues el electorado demócrata optó por Obama, quien no solo transmitió y comunicó de mejor manera la necesidad de un cambio y el fusionó en su persona al cambio mismo y a la esperanza, “Change we can believe in” es el lema de Obama, uno muy grande, pesado, de gran responsabilidad, de alcanzar la presidencia americana.
Hillary no supo hacer lo que Obama si pudo. Por eso perdió. Obama palpó el verdadero clamor popular de descontento y depresión colectiva que los ha llevado el errático gobierno de Bush. Obama también posicionó la idea del “secuestro” del clan Clinton del Partido Demócrata y la necesidad de caras nuevas, lo logró. Ahora todo es cambio que representa necesita un compañero o compañera de fórmula presidencial.
Los especialistas en política de los EUA dicen que un latino sería bueno. Otros dicen que no porque ya la cuestión racial es representada por Obama. Otro sector se inclina por una mujer…¿será Hillary?
Lo cierto es que, ambos emprendieron una histórica lucha: la primer mujer en luchar por la candidatura; el primer afroamericano en buscar la candidatura…y alcanzarla. La lucha de ambos puede ser común y no descarte ver una fórmula Obama-Hillary, que para los demócratas puede ser un “dream team” para vencer al republicano McCain.
McCain representa lo mismo que los americanos vienen padeciendo por cerca de una década: un gobierno bélico y desastroso. A una generación vieja que no encaja en la actualidad pero que daría certidumbre a los grandes capitales que respaldan al actual régimen.
De concretarse una fórmula Obama-Hillary contra McCain, representaría un cambio profundo contra un conservadurismo profundo, ¿están los EUA listos para un cambio o para seguir igual?
Lo cierto es que Hillary abrió la puerta a las mujeres de los Estados Unidos para aspirar a más gubernaturas, escaños y, por qué no, a que pronto Estados Unidos tenga una presidenta. Mientras tanto Hillary reflexiona sobre su futuro en espera de ver si cuaja una fórmula con Obama, mientras ella sigue su camino y como dice aquella famosa canción, there she goes…
ULTIMALETRA
Como Obama representa a ese cambio esperanzador, en el PRI de Chihuahua tienen ya 8 años esperando que llegue. En el estado la cúpula priísta ha sido la misma, prácticamente desde los 80’s, sin embargo con la llegada de un “joven” a la dirigencia estatal, se esperaban vientos de cambio, pero no fue así. En su dirigencia municipal llegó un joven activo que no despega…¿o no lo dejan despegar?
Viene para el PRI la renovación de su consejo político nacional. Chihuahua tiene algunos consejeros que elegir para tejer fino rumbo a 2009 y 2012, pero todo indica que el cambio esperanzador, la oportunidad para los jóvenes o nuevas caras que tienen mucha militancia tendrá que esperar, pues todo indica los consejeros nacional del PRI por Chihuahua serán puros cuates de la dirigencia estatal…como siempre.
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